Después de dos días de otra derrota y más dolorosa si cabe al ser en casa, nuestra casa, antaño fortín rojiblanco hoy día saqueado por cualquiera que ande necesitado de puntos, conocida ya la destitución de Marcelino García Toral, he escuchado la rueda de prensa esta mañana en la que le he notado muy emocionado, con voz entrecortada, agradecido con el club y agradecido con el periodismo, hoy he podido corroborar en nuestra televisión que, efectivamente Marcelino, con lágrimas en los ojos, se despedía de este club, de esta ciudad y de esta afición, Monchi no ha podido tampoco evitar las lágrimas y nuestro Presidente no ha podido ser más claro, no se cesa a Marcelino por ser un mal entrenador si no por los resultados.
Llega Michel, a mí particularmente no me convence mucho, pero si es lo que había en el mercado y no estamos para tirar el dinero, bienvenido sea, si al final de temporada, nuestro Sevilla FC termina sexto, le daré la enhorabuena, no veo el cuarto puesto ni por asomo, pero como el fútbol es fútbol, se puede dar la vuelta a la tortilla y que quedemos cuartos, ¿quién se podía imaginar a principios de temporada que íbamos a estar en esta situación a estas alturas de la liga.
En fin, a Marcelino le deseo toda la suerte del mundo y ojalá que vuelva a entrenar a otro equipo y logre éxitos, a Michel le doy la bienvenida y darle mi apoyo por lo que le queda hasta final de temporada, quizás ahora el periodismo sevillano sea más benévolo con él por su pasado madridista y no hagan las típicas preguntas absurdas y cansinas que hacen siempre y a las que estamos acostumbrados los sevillistas.
Se va a tener que poner las pilas y a los jugadores ponerles los puntos sobre las íes, entiendo que si a Negredo no le llegan balones no puede marcar, pero su actitud, aptitud o "jartitud" sobre el terreno de juego es para dejarle un partido o dos en el banquillo o en la grada y que se aclare, así no va a la Selección.
Esperemos que Michel sea capaz de enderezar el rumbo de esta nave a la deriva y podamos tocar tierra donde poder arreglar todos los desperfectos que hemos ido acumulando en esta temporada.
Hasta la victoria siempre.
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