Rara situación la que vivimos esta temporada, hace dos años fue la defensa, el año pasado el centro del campo y este año la delantera, así no terminaremos nunca, para colmo el rival, bueno el rival no (con todos mis respetos hacia el Mallorca), nuestro verdadero rival es su entrenador, Joaquín Caparrós, este señor saca petróleo de donde no hay, además de infundirle a sus jugadores espíritu de lucha y sacrificio.
Vamos a Mallorca sin referencia clara arriba, aunque Manu del Moral está dando la talla y el chaval responde con unas espectativas que no eran las buscadas, pero a falta de pan buenas son tortas, no me gusta el juego que está haciendo Rakitic, le veo perdido, sé que le hacen falta minutos, pero ahora mismo lo que el Sevilla necesita son tres puntos, optaría por darle la titularidad a Campaña y sacar a Luis Alberto con Manu, a Armenteros también se le vio en el partido ante el Granada falto de recursos y en más de una ocasión tuvo que ser Medel el que le sacara el balón de la banda.
Joaquinito nos va a asfixiar en cuanto a presión y seguramente nos regalará la pelota, tendremos que estar muy atentos en lo de adelantar la línea defensiva pues cuenta con gente muy rápida que nos buscará las espaldas.
La novedad de este encuentro es la convocatoria del japonés Hiroshi, aunque es poco el tiempo que lleva en el Sevilla Atlético y haber marcado un hat-trick con el filial, no ha tenido tiempo material como para entrar en la dinámica del primer equipo y puede que esté algo descolocado, de todas maneras si no le damos una oportunidad no sabremos si puede valer o no.
Seguramente Joaquín Caparrós habrá instruido a sus pupilos para que Jesús Navas no tenga opciones y si Manu del Moral juega solo arriba tampoco podrá hacer mucho, no va a ser un partido fácil y en el que habrá que tener la cabeza fría los 90 minutos, evitar los taconcitos y asegurar esos pases cortos que solemos perder con facilidad al igual que la excesiva conducción de balón.
Ya toca una victoria y es que tanto empate lo único que conseguimos es distanciarnos más de los equipos que nos interesa tener cerca, vamos a ver qué pasa y si podemos doblegar a un Mallorca que se me antoja lobo disfrazado de oveja.
Hasta la victoria siempre.
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